El olor a ajo que queda en las manos después de pelarlos puede ser irritante. Afortunadamente, existe una solución sencilla. Simplemente coloca tus manos bajo el grifo y deja correr el agua sin frotarlas. En pocos segundos, el olor a ajo desaparecerá por completo.
Además, si sostienes el cuchillo que usaste para pelar los ajos entre tus manos mientras el agua corre sobre él, eliminarás el olor tanto de tus manos como del cuchillo. No es necesario frotar, solo dejar que el agua fluya sobre ellos. En un abrir y cerrar de ojos, el olor desaparecerá sin necesidad de usar jabón.
Si prefieres no tocar los ajos ni el cuchillo, también puedes evitar los malos olores y facilitarte el trabajo en la cocina. Los ajos son un ingrediente común en muchas recetas, y es conveniente tenerlos siempre a mano.
El ajo es versátil y beneficioso para la salud. Contiene vitaminas B6 y C, así como minerales como manganeso, selenio, calcio, cobre y potasio. También contiene alicina, una sustancia con propiedades antibióticas. El ajo crudo actúa como anticoagulante, tiene efectos antibacterianos y antifúngicos, y se le atribuyen propiedades antivirales y antioxidantes.
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trucos de cocina
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